¿Qué tipos de tarjetas bancarias existen?

Crédito, débito, prepago… El llamado "dinero de plástico" ofrece una amplia variedad de opciones para adaptarse a las diferentes necesidades de los clientes. En función de tu perfil y de para qué la quieras, podrás elegir la que más te convenga. Te contamos qué tipos de tarjetas bancarias existen y cuáles son las principales características de cada una de ellas.

Aunque se dan ciertas particularidades entre las que ofrecen unas entidades u otras, existen básicamente cinco grandes tipos de tarjetas bancarias:

Tarjetas de débito

Tanto tienes en la cuenta, tanto puedes gastar. Así funcionan las tarjetas de débito, las cuales te permiten disponer de los fondos depositados en la cuenta corriente a la que se encuentre asociada, pero nunca superarlos. A partir de ahí, normalmente podrás usar esta tarjeta —una de las más habituales— para realizar pagos en comercios físicos y online, retirar efectivo en cajeros automáticos con un límite diario, así como para consultar saldos y movimientos de la cuenta.

Dentro de esta categoría se ubican las tarjetas virtuales de débito, las cuales sirven para realizar operaciones sin necesidad de contar con una tarjeta física. Por lo tanto, puedes comprar con ellas online o en cualquier establecimiento que tenga sistema contactless, así como retirar o ingresar efectivo en los cajeros con esa tecnología.

Como acabamos de apuntar y explica el propio Banco de España, “por razones de seguridad suele fijarse un límite diario, sobre todo para la retirada de fondos de los cajeros automáticos1.

Tarjetas de crédito

A diferencia de las de débito, las tarjetas de crédito no registran instantáneamente las operaciones en la cuenta, sino en el contrato de la tarjeta. Como su propio nombre indica, con este tipo de tarjetas es posible realizar pagos u obtener fondos a crédito hasta un cierto límite. A cambio, tendrás que devolver el importe de las compras realizadas a principio de cada mes —o en la fecha pactada con la entidad bancaria—, o bien ir abonando una cantidad mensual en cuotas fijas o variables, dependiendo de la modalidad de la tarjeta.

Las tarjetas de crédito son productos flexibles y muy útiles. Existen distintas modalidades de pago y un límite de crédito máximo. Ya que son las más conocidas, veamos cuáles son sus principales ventajas:

Ventajas de las tarjetas de crédito

Entre las principales ventajas de las tarjetas de crédito, podemos apuntar las siguientes:

  • Flexibilidad a la hora de pagar el dinero que has gastado. Por un lado, puedes acometer el pago total sin ningún tipo de interés por aplazar el pago. Y por otro, tienes la opción de aplazar ese pago y devolver el dinero en varios plazos con sus correspondientes intereses. Es decir, puedes ajustarlo a tus necesidades.
  • Posibilidad de poner límites de crédito para controlar mejor las finanzas personales. Esta es una característica que debes aprovechar para tener un mayor control del dinero que estás gastando a lo largo del mes.
  • Prestaciones extra. Muchas tarjetas de crédito tienen asociadas algunas prestaciones como seguros (de viaje, robo…), beneficios para los que viajan o la pertenencia a programas de fidelización.

Tarjetas prepago

También conocidas como tarjetas monedero, permiten realizar abonos —en general de pequeño importe— u obtener dinero hasta el saldo que previamente tú hayas fijado. Con ellas cargas el importe necesario para tus compras online y si te sobra dinero, puedes traspasarlo a tu cuenta. En ese sentido, si se ve comprometida, solamente perderás el saldo cargado. Aunque si eres consciente de ello, puedes traspasar el saldo a tu cuenta inmediatamente.

Por ejemplo, la Tarjeta Prepago eCommerce de Openbank es exclusiva para tus compras online y la tienes disponible desde el momento de contratación. Puedes recargar y descargar saldo a través de la web o la app, o incluso en cajeros de Banco Santander. Te olvidarás de las tarjetas físicas, puesto que solo podrás gastar lo que hayas cargado previamente. Una vez agotado el saldo, las tarjetas prepago pueden recargarse en cualquier momento. Por eso es la mejor opción para las compras por internet. ¡Consíguela al instante! La tendrás disponible al momento de contratarla.

Productos como la Tarjeta Prepago Open Young son muy útiles para gestionar el dinero de los hijos y conseguir así que se familiaricen con el uso de las tarjetas de una manera responsable.

Tarjetas revolving

Denominadas también como tarjetas de pago aplazado (debido a que son flexibles en ese aspecto), ofrecen la posibilidad de devolver el crédito mediante el abono de cuotas periódicas que varían en función de las cantidades utilizadas. Eso sí, dentro de unos límites prefijados. Es importante hacer un uso responsable de estas tarjetas.

Otras tarjetas

Openbank no reduce su oferta a las modalidades clásicas de tarjetas de crédito o débito, sino que va más allá. De este modo, ponemos a disposición de los clientes otros tipos de tarjetas.

Un buen ejemplo de esa variedad es la tarjeta VÍA-T, con la que se evitan molestas esperas al pagar en parkings o en el punto de peaje; y la tarjeta de débito solidaria, gracias a la cual cada vez que efectúas una adquisición, acumulas donaciones para colaborar con la ONG que prefieras.

Como puedes comprobar, existe una amplia diversidad y flexibilidad en lo que se refiere a los tipos de tarjetas bancarias. Solo queda decidir cuál puede proporcionarte un mejor servicio en función de tus prioridades.

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